EL INGREDIENTE SECRETO PARA UNA ENSALADILLA RUSA DE CAMPEONATO

La ensaladilla rusa, un clásico de la gastronomía, es un plato que muchos disfrutan en ocasiones especiales. Sin embargo, ¿qué hace que una ensaladilla rusa sea digna de un campeonato? Existe un ingrediente secreto que marca la diferencia y eleva su sabor a otro nivel.

En esta ocasión, te desvelaremos el misterio y te mostraremos cómo incorporar ese toque especial a tu receta. Prepárate para sorprender a tus invitados con una ensaladilla rusa única y deliciosa.

Ingredientes para preparar la mejor ensaladilla rusa

¿Estás listo para preparar una ensaladilla rusa de campeonato? En esta ocasión, te revelaré una lista de ingredientes que harán de tu ensaladilla un plato irresistible. Toma nota y asegúrate de tener a mano:

  • 500 g de patatas
  • 4 l de agua de mar
  • 100 g de zanahoria
  • 30 g de cebolla
  • 500 g de coloraíllo (o gamba)
  • 600 ml de aceite de girasol
  • 2 huevos

Además, necesitarás algunos ingredientes para preparar una deliciosa mahonesa casera. Asegúrate de tener a mano:

  • 1 huevo
  • Sal al gusto
  • 1 cucharada de zumo de limón
  • 200 ml de aceite de oliva virgen extra
  • 600 ml de aceite de girasol de los coloraíllos.

Paso 1: Pon en una olla aceite y agrega los coloraíllos

Comienza por la preparación del aceite de los coloraíllos. Empieza pelando los coloraíllos (o las gambas pequeñas), reservando los cuerpos para usar más adelante. En una olla a fuego medio, coloca todas las cabezas y un poco de aceite de oliva, dorándolas. Luego, añade el aceite de girasol y reduce el fuego al mínimo. Deja que se cocine durante 4-6 horas sin que llegue a hervir.

Una vez pasado este tiempo, retíralo del fuego y déjalo reposar durante al menos 12 horas, manteniéndolo en frío una vez que se haya atemperado. Cuando haya transcurrido el tiempo de reposo, cuela la mezcla, presionando ligeramente las cabezas para obtener todo el jugo.

Paso 2: Pon en agua las patatas limpias

En una olla, vierte el agua de mar y añade las patatas previamente limpias y con piel. Lleva la olla a ebullición y cocina las patatas hasta que estén completamente cocidas (verifica su cocción pinchándolas con un objeto punzante, asegurándote de que no ofrezcan resistencia).

Retira las patatas del agua y déjalas enfriar a temperatura ambiente. Después, pela las patatas y, utilizando un tenedor, aplástalas hasta obtener una textura desmenuzada, asegurándote de dejar algunos trozos intactos.

Paso 3: Corta las zanahorias

Para empezar, toma las zanahorias y pélalas. Luego, córtalas en cuadraditos pequeños, en una técnica conocida como brunoise. A continuación, escalda las zanahorias en agua ligeramente salada hasta que estén tiernas, aproximadamente durante 3 minutos. Transfiérelas a un recipiente con agua y hielo para detener la cocción y reserva para su uso posterior.

Paso 4: Coce dos huevos en agua hirviendo

A continuación, procede a cocer dos huevos en agua hirviendo durante aproximadamente 10 minutos, hasta que alcancen el punto duro. Una vez cocidos, pélalos y pícalos en trozos separando la clara de la yema.

Reserva la yema entera para su uso posterior. Luego, procede a picar la cebolla en trozos muy pequeños y resérvala para la mezcla final. Sumérgela en agua con hielo para reducir su intensidad.

Paso 5: Para la preparación de la mahonesa

Para preparar la mahonesa, coloca un huevo en un recipiente y añade una pizca de sal, un toque de vinagre y un chorrito de limón. A continuación, comienza a montar la mezcla incorporando una combinación de aceites, utilizando 3 partes de aceite de coloraíllo por cada parte de aceite de oliva virgen extra suave. Continúa batiendo hasta obtener una emulsión homogénea y de buena consistencia.

Paso 6: Combina las patatas con los otros ingredientes

En un recipiente, combina las patatas previamente escurridas, la cebolla bien escurrida, la zanahoria y la clara de huevo. Añade la mahonesa gradualmente y mezcla bien hasta obtener una textura cremosa, asegurándote de que haya la cantidad adecuada de mahonesa para lograr la consistencia deseada.

Paso 7: Sirve la ensaladilla rusa

En una sartén a fuego alto, saltea los cuerpos de los coloraíllos con un poco de su propio aceite. Luego, en el plato, utiliza una cuchara para servir una porción abundante de ensaladilla. Cubre con una capa generosa de mahonesa y coloca los cuerpos de los coloraíllos encima. Para finalizar, esparce la yema de huevo desmenuzada por encima.

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